Shion aparece frente a los de bronce y les muestra cual era realmente su objetivo. Toma la sangre de Athena y la vierte sobre su estatua. De la estatua de Athena sale otra igual pero en versión peque, la cual es nada menos que la armadura de Athena. Shion les explica que sus verdaderas intenciones (incluso las de Afrodita y Deathmask) eran las de conseguir la armadura de Athena, ya que es una pieza fundamental para poder vencer a Hades.

      En el castillo de Hades, Saga, Shura y Camus le llevan el "cuerpo de Athena" a Pandora, pero a pesar de eso, se niegan a entregárselo. Pandora comienza a sospechar y sospecha bien, porque cuando se da cuenta de la situación, ya se encuentra amagada por Shura. El supuesto cuerpo de Athena no era más que una sábana llena de sangre.

      De nueva cuenta en el santuario, parece que el tiempo se le acaba a Shion, pues comienza a debilitarse. Shion sabe que la batalla apenás está por comenzar, así que toma la sangre de Athena y la avienta a las armaduras de los de bronce. Para sorpresa de Seiya y los demás, sus armaduras han cobrado nuevamente la vida y se muestran rebosantes de energía. Pero para Shion las cosas han terminado, ya no tienes más energías para ponerse de pie, así que le encomienda a Seiya y compañía dirigirse rumbo al castillo de Hades.